comenzó a trazar mentalmente la línea que le llevaría a aquel lugar.
Realmente no necesitaba prestarle mucha atención al asunto… se podría decir que sabía el camino de memoria, porque de hecho, lo había recorrido al menos dos veces al día durante todas las jornadas laborables de los últimos dos años.
Pero aún así, le gustaba poner un toque de novedad a cada día.
Si no, acabaría tan muerto como sus compañeros de trabajo.
De momento, ya tenía el mismo olor, consecuencias de ser el profesor adjunto de Anatomía en una de las Universidades más prestigiosas del país… todo en su vida olía a formol. Ya no había olor a rosas, ni bistec con sabor a bistec, ni siquiera conseguía distinguir el aroma a café que siempre adoró del de su ropa…perfumada con formol por supuesto.
Comentan que su vida es aburrida. Siempre fue un estudiante modelo. Terminada la carrera, quiso dedicarse a la docencia, y no tardó en obtener una plaza, aunque ésta esté considerada como un escalón por debajo del puesto de esclavo, lo que se podría traducir como un sueldo ínfimo por infinitas horas de trabajo.
De ahí la necesidad de evadirse y buscar un poquito de vida, de inventar mil historias y abstraerse en ellas, lo que contribuye a su aspecto de persona despistada y lejana. Y sobre todo, solitaria.
Lo cierto es que después de tanto tiempo escribiendo, con kilos de manuscritos en el trastero, le apetece ser el protagonista, no olvidando su puesto de poder, de elemento controlador. De pequeño dios.
Se duchó, desayunó y terminó de arreglarse mientras seguía repasando cada parte del plan.
En menos de una hora crearía su propio modelo anatómico, sin piel acartonada y pálida, sin olores incómodos ni molestos coágulos. Real y fiel.
Crearía también una pequeña leyenda, sería un mito en la Facultad, o quizá, con suerte, en la historia macabra de España.
Y haría de algún chico simple y perdido entre la masa un pequeño héroe-víctima-fantasma conocido en los siglos siguientes... un irónico privilegio, sin duda.
Entonces todo quedó reducido a una palabra: quién.
miedito!!!
ResponderEliminarte imaginas que un profe de tu uni hace eso????? madreee madreee yo siempre estaría vigilando, por si acaso
me ha gustado mucho el relato y es muy original!
p.d: al caribe??? noooo que es muy típico, París en mil veces mejor hombre!!!
Vayaaa!!! espero que esto tenga continuacion porque... me dejas super intrigada!!!
ResponderEliminarUn besazooo
Puf ¿quién? ni idea...pero lo del olor a formol lo he sufrido. Me disfracé el año pasado con la bata de prácticas y por poco mato de intoxicación formólica a todo mi alrededor (jiji) Darás respuesta? bst
ResponderEliminarRelato ganador!!!!!!!!!! Bien pensado, por partes ;)
ResponderEliminarMua
A ver el final es que el tío busca a alguien para chin chin chin chin (música de asesinat-intriga), no?wque pasada, los profes de anato son raritos, pero vamos...a ese se le ha subido el formol a la cabeza xDDDDDD
ResponderEliminarmuaaaaaks
El relato!!!
ResponderEliminarNebu!! me ha gustado mucho. Toques de misterio embriagados de una naturalidad contidiana que cautiva a cualquiera. Deja un pelin de malestar por ese profesor tan extraño... Mola!
A veces hasta los mas lineales se cansan de su rutina. Lo malo es cuando se pasan y se vuelven tarumbas XD
Un besito y muxas gracias por ponerlo!! ^^
A mi esos olores no me desagradan, pero claro, pa un ratico nada mas...
ResponderEliminarLos olores son muy cansinos cuando perduran, el otro día sin ir mas lejos me pasé torrando el lomo y el olor a lomo torrao me acompañó la tarde entera... Casi que he aborrecido el lomo se puede decir... (Bueno, esto es una anecdota verídica que ni sé porque he contado...)
Un saludo apañá!
Se me ha encogido el corazón. Por favor, espero que continues con este relato, hacía tiempo que una lectura no me enganchaba tanto.
ResponderEliminarPues a mi me gusta el final asi, es perfecto.
ResponderEliminarNo hay facultad de Medicina que se precie sin elenco de profesores de Anatomia raritos, curioso.
Un abrazo
Ciao
Qué wai! A mi me encantan los relatos, a ver si escribes más.
ResponderEliminarAla, qué pasada :O. Estoy con W., el final es pefecto
ResponderEliminarCreo que lo he contado más de mil veces, pero mi profe de filosofía siempre me decía que todos los médicos llevan un asesino en su interior. Y se dedican a salvar vidas para luchar contra su tendencia natural a acabar con ellas...
Tu! :) Malvadilla ;)
ResponderEliminarains se va a meter en formol???
ResponderEliminarjajaja me recuerd aun poco al libro de "El perfume" .
ResponderEliminarueno,mis profes n huelen a formol,peor la verda es que se les suele ir mucho la cabeza jaja,así que...tendremos que andar con ojo! xD
un besotee!!
conclusion: la gente que tiene expediente brillante al final salen raros
ResponderEliminarMe alegro de que tengamos algo en común,gracias por pasarte por mi blog.
ResponderEliminarAndare por aqui mirando.
Besos
Que way!! Y tiene continuacion?? Que intriga!
ResponderEliminarMe ha gustado mucho, nos tienes que contar mas! ^^
Normal que ganaras porque el relato es muy bueno.
ResponderEliminarEl olor a formol es muy malo, jeje.
Un beso!!
Ostras qué repelús xDDD
ResponderEliminarAcabo de leer tu comentario en mi blog. La verdad es que se agradece saber que te leen :) Y sí, probablemente empezamos en la misma facultad!
Bueno, te añado a mi lista de blogs y espero seguir leyéndote.
Qué yuyu!! Jeje. ¿Y qué pasa al final? ¿ Qué hace? Se mete en formol como dice chiri? jeje
ResponderEliminarMola la breve historia ;) Perdona por no haberla visto antes
Besotes!
Un tanto... acongojante. Menos mal que lo mío es todo ecuaciones y paranoias de esas, que si tengo que ver ahora al profesor de anatomía me da algo :P. Muy bueno. ¡Un beso!
ResponderEliminarConozco algun Catedrático de distintas especialidades médicas que son así....los defines muy bien..."Pequeños dioses"...
ResponderEliminarTu les conoces desde el trato alumno/profesor (no sé ,si ya estas haciendo el MIR).....yo les conozco desde un trato más directo y más agradable, pero sé que tienes razón...
Tambien es verdad que no todos son así, al menos en el HUCA, que es el que mejor conozco...
Volveré, si no te importa...
Besote desde Oviedo.
Tienes una invitación en mi blog Una de Nosotras y en el otro blog de Nosotras Mismas ;)
ResponderEliminarFelíz Lunes!
la imaginación nos salva del aburrimiento. Buena historia... besitos!!!!
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