La abuelita cebolleta

En estos días de verano hay pocas cosas de las que hablar, la vida de vacaciones es más bien aburrida (y más cuando tener que ir al fisio a diario te ata imposibilitandote viajar más de lo que tu madre ya de por si te imposibilita¬¬) y por motivos desconocidos, quizá sea el calor, quizá la misma ausencia de temas de conversación por parte de los demás, el sábado me recordaron varias de mis travesuras infantiles.
Yo era una niña muy buenecita y muy tranquila generalmente. Jugaba con mis muñecos, les daba clase en mi habitación y poco más. Pero de vez en cuando se me cruzaban los cables (como ahora xD)

Un día, mi madre no me encontraba por la casa. Las habitaciones, los baños, el salón...no estaba en ningún sitio. Le dio por buscarme en la terraza, que es bastante grande y podría haber salido a jugar. Pero tampoco. Vio la puerta de la despensa que tenemos en la terraza abierta y...sí. Ahí estaba yo, de puntillas, enganchada a un chorizo que colgaba de una cuerda xD

Esa misma terraza presenció otra de las mías. Mi tía salió, no sé a qué..y yo me quedé dentro. Así que se me ocurrió cerrar la puerta de la cocina. Cuanto más se quejaba ella desde fuera, pidiéndome que le abriese, más me reía yo (apartaba la cortina, la señalaba y me escojonaba). Seguramente os imagineis que al final le abrí. Era tan buena...pues no.
Tuvo que saltar por una ventana para entrar a casa, que por suerte se había quedado abierta. Si no, a saber...quizá siguiera allí fuera todavía xD.

Los veranos los pasaba en el pueblo, en casa de mis abuelos con mis primas. Teníamos un perro al que yo quería mucho, y al que hasta enseñé los colores (y que nadie diga que son daltónicos). Un día, un chico del pueblo, mayor, dijo que si el perro le tocaba, lo mataría. A lo que yo, con mi lengua que ya por aquel entonces era rápida, le solté un "si tu matas a mi perro, yo te pego una patada en los huevos". No se me olvidará nunca la mirada de sorpresa de mis tres primas (mayores que yo) en ese momento. (Ni tampoco la bronca que me cayó al llegar a casa)

Y por hoy creo que ya vale de historietas de abuelita cebolleta.
Por cierto, ya que veo que os ha interesado tanto la historia de mis vecinos...me he enterado de que los padres han llamado a la Policía así que espero que pronto nos enteremos del misterio.